viernes, 20 de diciembre de 2013

Comienza a observarse a si mismo en lo que hace.
Algo ha de significar.

lunes, 4 de noviembre de 2013

es normal que las manos sangren mientras sujetan el matráz, que el brillante drone sonoro del fuego y la luz que produce le intenten cegar através tal vez del cristal de los espejuelos, por lo que es importante mantener los ojos cerrados.
oscurece mientras el caldo brillante acelera poco a poco la velocidad del tiempo, amanece mientras la sublimación de cada sueño va soñando una a una las propiedades de la materia.

martes, 17 de septiembre de 2013

La primera vez que fumé mota estaba sobre un cerro desde el que se contempla todo el valle, miraba las nubes pasar y sentía las manos frías al tiempo que escuchaba lo poco que salía de los audífonos que acababa de pasarle a la morra de enfrente. Un primo preparaba otra manzana y yo sentía que se hacía tarde a medida que los fragmentos del darkside que alcanzaban llegar a mis oidos me recordaban el pasillo de un hospital, unas piernas delante mío y rechinido de rueditas mal lubricadas.

domingo, 4 de agosto de 2013

El viernes festejamos un cumpleaños hasta que amaneció siendo sábado y nos encontramos sentados en 12 packs de cerveza lager en el baldío a mitad de un fraccionamiento sin vigilancia, las palabras incompletas y la despedida con besos en la mejilla, luego el salto de nivel y conducir de regreso al pueblo buscando alivio del hambre.
A pocos metros de la casa de mis padres soné el claxon para saludar a un tío, el zaguán se abrió y aparecieron mi madre y hermano a quienes acompañé a conseguir flores de calabaza. Regresé con los zapatos llenos de lodo a dormir un par de horas.

viernes, 12 de julio de 2013

contraindicaciones

La decisión para dar el salto llegó en una forma para la que nadie estaba preparado. A todos les tomó por sorpresa y la mayoría no dudaron un instante para elegir. Elegir debe tener algo que ver con elegía, eligere, elegíaco, no puedo pensar más. Hay que encontrar a alguien que no conozco y no sé cómo le explicaré el mensaje que debo darle y que he escuchado más de mil veces sin entender aún un ápice de su contenido.

lunes, 8 de julio de 2013

Embarga una tristeza sin nombre, del mismo color que el fondo, comparte la dimensión del vacío, escapa por el rabillo del ojo cuando alcanza leer el remitente de tus telegramas, tu registro de visitas, el temblor de tus labios, antes lo supe, mirar tiene la profundidad de una galaxia, lo sabremos tras años luz, tenemos lenguas distintas y un juego común, pero aún dos que se encuentran por primera vez contruyen su región en blanco en el papel, una noche de mirar estrellas, la ciudad me está haciendo pedazos y no hay nada que hacer.
No acabamos de dar el paso porque no hay escalón donde plantar el pie. Pero eso a nadie le importa y es junto a la caja de recuerdos aquí a mi lado que la sombra borrosa del tiempo fluyendo en sentido contrario (a las manecillas de un reloj) se proyecta en un amanecer ocaso que no termina de ser. Magnifluorescencia. Gira.

miércoles, 3 de julio de 2013

Taller

Cuando usan la problematización en un dominio como motivación para su desarrollo, las ciencias se ingenierizan. Se vuelven líneas de dirección para la persecución de objetivos, de proyectos e intensiones y abandonan su paper como generadoras-creadoras de las mismas. Se hacen subordinadas de intereses ajenos y sirven lo mismo que un trozo de metal maleado.
Las ciencias deben ser invención constante, libertad de la exploración por la exploración, del juego por el juego. El uso aparece después.

viernes, 21 de junio de 2013

tiras de instrucciones

Cuando morro, en el remolque de máquinas, mi papá y yo reíamos hasta doblarnos inventando pronunciaciones para la tira de precauciones escritas en muchos idiomas que venía con los juguetes de los huevos kinder. Después con las faltas ortográficas de los escolapios, después con las faltas ortográficas de otros adultos. Recordarlo me hace reír.

jueves, 6 de junio de 2013

Pienso en publicar cosas que no he escrito. Es la gran contradicción.
Hasta hace poco la habitación mantenía el orden natural impuesto por la costumbre y la entropía, entropía de la costumbre, luego la cortina y todo el asunto del viento, y el nuevo desorden, acaso de segundo orden, como si la primera vez no hubiera suficiente.
Así hasta la alegoría, hasta que solo el sarcasmo nos quede y la calle se haga estrecha como cuando alguien dice, hace falta aquí una nueva lógica, una estructura más amplia para comprender los componentes, no unidades, hipervínculos ocultos, una sopa de letras. Solo queda insertar símbolos ortográficos por aquí y por allá. Dónde tiene lugar el abandono para mi libertad de padecer.
La gran contradicción es generadora constante.

sábado, 11 de mayo de 2013

Cada vez más, hay una sensación apocalíptica en todo esto.

árboles

Me tocó el asiento junto al abuelo en la cena de ayer, contó historias de su padre en la revolución, luego, en toda su vida. Breves y contundentes historias de hechos crudos y dolorosos. El bisabuelo como un hombre atormentado y distante aunque al final, por unanimidad, encontró la paz. En algún momento la luz que entraba por la puerta iluminaba su rostro y mire con atención el color de sus ojos. El sonido de otro engrane en marcha.

jueves, 18 de abril de 2013

paridad paridad paridad paridad paridad paridad paridad pariodadipa aodiadiap aid apadpa ppad apwp d pp apsodapp  ppapeofoadop p asp dpaspd asppapsp pap s pspd apsd pas spa pp sa dpaspipdpaspidppiaspipdapapidipa apsdi pasip dapsipda spddai spdias pdapsid a psdpiasi d apsid apsid a pspdia spddai s pdiapis ddap sidd apsid apsdida spd ia iapaeidiuada paproa rod aoaoro  aopaopeoaose ñaoawroñasiaposaoproaps asoaparidadp aosraiodo as apsriasd as dpa dsiasr asor aspofidaspdf a psadaps dasp

update: el dedo anular izquierdo es el más perezoso de todos.

miércoles, 17 de abril de 2013

ATLG130416

Peor, apagué el despertador y me volví a dormir, desperté como 20 grados solares más arriba, actividades de rutina, compré un yogurt en la tiendita de la esquina y rodé al instituto. Me serví café y estuve revisando el código de los últimos experimentos, luego hice unas notas en una página fechada hace una semana. Cambiaron algunos parámetros de los experimentos y fueron repetidos, se terminó el café y era las 11 de la mañana, unas enchiladas rojas como almuerzo y en la espera posterior a la orden (previa al almuerzo) el recuerdo de un mensaje de ayer resonó. Al terminar hubo una llamada telefónica de prueba, luego una efectiva para fijar un plazo de 15 minutos por lo que hubo que desatar o desencadenar la bicicleta de aquel árbol junto a la vieja oficina, rodada otra vez, espera y nunca ocurrió la reunión planeada, desesperación y luego un repaso de una ruta recorrida una sola vez que va hacia el norte. La transición en el aspecto de las calles al salir de la ciudad, unos horrendos topes de adoquín que golpeaban la rueda con violencia, creo que era por allá, sí, pero no hubo certeza cuando la calle pasó del adoquín a la terracería y luego al asfalto. Finalmente la puerta apareció aunque al acercarse notó el candado, unos breves golpes con los nudillos, nada.
El camino airoso empuja como en aquella pista de videojuego death wind aunque no podría sacar a alguien de la ciclovía. Al regresar al instituto eran casi las 2 pm y el sol daba como nunca, sudoroso y un poco cansado. Casi a las 3 comida con los doctores, albur y recomendaciones para quien visita París durante dos días, la guía rápida del Louvre, el arco, la torre, iglesias, cabarets y hoteles. Un café para la digestión y no quedarse dormido, más experimentos breves que se quedan colgados, la reiteración de la visita al cuarto cerrado se gestaba y a las 5 se materializó. Otra vez fracaso y eso es algo bueno porque así pasará el 20 de abril despierto por más que trate de seguirlo evitando.
La recta final del día fue de las 7 a las 11 pm en que publiqué fotografías en sitios de ventas, comentarios y microcharlas. Más o menos al terminar le dije a D que quería que inventásemos un personaje entre ambos dos para crearle una cuenta de twitter nomás que me confundí y lo plantié alrevés (cuenta y entonces personaje), ella dijo sí y que tenía sueño. Me sentí como chocando muy lentamente contra una pared flexible. Y ahora recordé al ruso que, paseando en su bicicleta choca contra un camión, el chofer se molesta y el ruso continua su camino diciendo el mundo no existe fuera de mi subjetividad, en otra ocasión, pensando en la forma ordinaria, no hubo colisión pero sí ocurre algo y su mente despierta a esta verdad: No hay nada, salvo mi subjetividad.

martes, 16 de abril de 2013

ATLG130415

*
El término autólogo refiere al tratado sobre sí mismo.
**
Durante el día hubo pensado unas 1000 veces en la palabra disciplina, en los términos con le plantearía a ella todo el asunto, cuidando el modo de mantener el río en el cauce concentrado en la fragilidad de una pared de arena.
Llegué a casa a las 10 de la mañana, quedó un poco de tiradero por el domingo así que lo levanté, puse café y encendí la máquina para buscarle pues la urgencia de hablar con ella me impediría concentrarme en cualquier otra cosa pero no apareció, busqué una bacha y fumé un cigarro de una caja olvidada.
Fui a husmear un poco por comunidades de músicos e hice un cartel para buscar baterista, diserté semi-libremente en la libreta verde y terminé el café, se había ido la mañana! a las 2 pm estaba en el instituto, reinicié la conexión y acomodé algunos archivos, salí a comer y de regreso encontré a dos compañeros, regresamos juntos al laboratorio imprimí papeles y a las 430 huí del instituto para volver pedaleando a casa, liberar espacio en la maleta y encaminarme a la ciudad. Llegué 15 minutos antes de las 6.
No pude observar el desarrollo del encuentro como hubiese deseado, la plaza estaba llena de personas y las bancas con sombra ocupadas, busqué un sitio casi en el piso y retomé la lectura comenzada en el autobús con los preceptos fundamentales que caracterizan el budismo zen.
Durante la charla bebí una limonada mientras ella reflexionaba sobre la depresión y el sin sabor de la rutina, necesaria y mortal como todo mal, como toda vida. Volví a casa a las 10 pm satisfecho por la charla pero confundido y me comí dos tacos.
Al volver me han planteado el reto de encontrar 20 personas de más de 70 años en twitter.
Es una emoción tras otra.

lunes, 1 de abril de 2013

mefistófeles

ver y dar un nombre es poco tiempo igual,
que dar un nombre y ver.

fueron esos trazos que hallaste
callaste.

los he visto funcionar
de si existen no sé.
Si me quedo más tiempo buscando las palabras que mejor describan lo que quiero decir, me quedaré en silencio largo rato, cuando largo tiende a infinito.

domingo, 24 de marzo de 2013

Viernes de una larga caminata nocturna por un camino como de aquella película postapocalíptica basada en una historia de cormac mccarthy, un poco de aburrición infinita, di-monólogos, muchachas de largas piernas y una bebida saborizada de ananás con hielitos.
Cada vez es como pausar la historia, como escapar un poco de la rutinesca dinámica podrida, como ser-encarnar en alguien distinto, en otro espacio tiempo, otro mundo y contexto, con nuevas libertades por inventar y apuntando al éxtasis. Distinto pero idéntico, alterno. Siempre termino aburrido y luego todo en esa dirección se vuelve identidad.
Está esa sensación como de no pertenencia, la inadaptación al regreso, después de despertar, no tolero el mundo como es, ni como era. Ojalá fuera como cuando la resaca de autobús purificaba de toda mancha ganada. La imperturbable tranquilidad de ser una hoja seca que navega el cauce de un inmenso lago espejo.
La novicia no responde, trastea otra vez, las diferencias de querer y querer+poder se manifiestan a ratos, como si de pronto una conciencia oscura negara el discurso circular de mi cabeza y todo el mundo sabe que es necesario un gran conjunto de consideraciones especiales cuando bucles anidados son interrumpidos en los niveles más profundos.
Como fichas de dominó esperando la conclusión, el espectáculo tragedia de caer de espaldas. paf.

sábado, 16 de marzo de 2013

Apenas pasa de mediodía pero es como ir caminando la primavera pasada en la ciudad de torre y río. La oscura y gravitativa sensación de que podría caer a mitad del paseo por la calle, fulminado por un rayo enviado por algun Zeus metaimaginario sin que a nadie le importara un comino.
Al menos la vez pasada estaba en mitad de un parque lleno de gente, aquellos futbolistas negros habrían tropezado con el fiambre y solo tal vez lo habrían reportado.
Pero aquí no. Realmente no hay nadie que vea y si no le escribo a la novia no sé si algo, en algún momento vaya a pasar.
¿Cómo escapo de la zona de comfort con este pinche frío?

martes, 12 de marzo de 2013

soñé una fiesta en la calle con música y los extraños colores que solo se ven en sueños y buscaba un conecte y encontré a uno muy amable. luego madre pasó caminando cerca y preguntó por lo que hacía. conteste con honestidad tanteando sus reacciones, le dije calma, debo terminar este asunto y ahora te cuento en la casa pero al terminar seguí caminando en la dirección opuesta, derecha izquierda derecho, saludando a personas a quienes hace mucho no veo. regresé a contarle y me fui caminando hasta una fiesta en el piso de arriba de una casa incompleta, no entré pero varias personas me saludaron desde el hueco de una ventana.
como muchos otros días fui a tu casa a buscar el refugio de tus palabras porque el asunto me estaba sobrepasando y apenas me alcanzaba el aliento para cruzar el puente de la avenida, de derecha a izquierda primero, de cerca a lejos después.
volvió a sorprenderme el letrerito con el nombre de la calle que nunca recuerdo cómo deletrear, los grandes y redondos ojos que me miran mientras pienso en cómo tus ojos miran cuando en la misma dirección miramos, revelamos, rebelde.
llegando vi el candado de la puerta, emocionado por estar medio abierto que no siempre pero sí esta vez también significó medio cerrado, alquitranado por todo el humo di vuelta y descansé en el parque de siempre, de noche, de frío, de estar expuesto y estrellas y dormido.
creí verte cruzar la ventana, apagar la luz de una habitación en el piso de arriba seguramente dormida, engristecida albornotada, como atorada, como encaminada en el bucle de un paso subterraneo que te sacará hasta allá, hasta haberte pasado de la estación, donde me verás y lo sabré pero fingiré no verte y luego seguirte hasta el vagón y buscaré un asiento atrás, para mirar como me miras, como finges que juegas a mirarte los zapatos y hemos de atraparle en ese momento porque al bajar seguirán las escaleras y el torniquete y los guardías me detendrán por caminar con las manos en los bolsillos y tu estarás tomando el autobús y yo corriendo, conozco el único atajo una mañana nublada. el sol sale por la dirección equivocada.

lunes, 18 de febrero de 2013

Acaba de concluir el examen de grado de mi amigo Yagul con quien los postulados científicos recuperaron el carácter lúdico. Como las veces que recolectabamos muestras de caminos para construir mapas en un auto anaranjado, tomando una cerveza en la parte más calurosa del día o dándole hits al jittler y planeando la independencia del pueblo con todo y sus futuros acuerdos (con las naciones vecinas) para sostener la economía. Todo es acerca de crear.

sábado, 16 de febrero de 2013

pienso en la historia de un agente encargado de infiltrarse en mi red para vigilarme, de montar el teatro de una vida para obtener un nivel de acceso a información específica dado un conjunto de (hasta ahora ajenos) intereses. pienso en el (des)montaje del escenario, en la preparación y en el más digno sospechoso de entre quienes habitan alrededor.

miércoles, 13 de febrero de 2013

Me gusta cuando los escribientes refieren a una persona cuya identidad se puede inferir mediante la palabra alguien, como queriendo ocultar el nombre con rayones sobre las letras que terminan atrayendo la atención más que la palabra original.
Hace unos días mi padre preguntó por la continuidad de mi relación con la novia, hará siglos que mi padre preguntaba por asuntos de mi vida personal y con justificación porque no es el tema que más disfrute discutir con él. Sin embargo a ella le conoció en la comida de Toni, habremos mencionado su nombre tres o cuatro veces y ahora hasta pregunta por ella. Le he dicho que no se apure, pronto le verá.
Hice un plan de trabajo para organizarme esta primavera, apenas ha empezado y ya siento que no tengo un ápice de tiempo para actuar con libertad, es decir, perder el tiempo y para qué quiero perder el tiempo cuando le ando juntando de poquitos a ver si a así algo puedo juntar.
En el lecho de un río sin agua lanzamos brazadas y pataleos, giramos y extendemos los miembros, repetimos el procedimiento en cada vuelta, nos tomamos la mano e intercambiamos miradas de un lado a otro, tomamos bocanadas de aire y levantamos el pecho, nos dejamos flotar y que la corriente nos arrastrea a donde quiera, nos sumergimos tanto en nosotros mismos que estamos paralizados, inmóviles sentimos que comienza a llover, el agua de las gotas está helada.

lunes, 11 de febrero de 2013

Carla se ha avejentado. La rutina me mata, me da una muerte pero no una muerte de las que te llevan a otra vida sino de las que te atan a esta. Como el hombre que duerme, como el pasto junto al camino.

lunes, 4 de febrero de 2013

hay cada vez más palabras que me gustan menos. hará un par de días he robado un libro por primera vez, la vuelta al día en 80 mundos. casi 10 años atrás le conocí en la biblioteca del edificio arronte.
pienso mucho en lo que escuché el otro día, qué iba a escribir si no me pasaba nada. despacio el hombre cultiva su pasos. digo cosas, la mayor parte del tiempo sin sentido, tardo un rato en caer en la cuenta. los asesores han dicho hay potencial, claro que lo hay, lo que no hay es disciplina. la vida como el instante oscilatorio. libertar-responsabilidad.
y yo qué digo, se pregunta, ahora no sé qué lo hizo pensar que tendría algo que decir.
será verdad que la contemplación es una postura, que la falta de postura es postura también.
cuando lo pienso, se parece al jueguito de siempre, tose en el puño del traje, levanta la vista, aclara la garganta y escribe el signo de salir de la situación, de detener y escapar al tiempo, reencuentra la situación, otra situación, alguna situación.
todo el tiempo es ninguna parte, como polonia.
extraño las charlas recursivas.

lunes, 21 de enero de 2013

No creo en la suerte y la búsqueda de la verdad absoluta es un campo esteril por definición. No aprendemos, no contemplamos. No asistimos a la puesta en escena de un guión determinado por un texto divino. No existe un esquema de conocimiento que corresponda a la realidad.
Es la rev-ol-ución dadaísta.
El gato cappuccino es muy grande, janis se ve muy bonita. Hay una nueva carretera en el norte, se ve desde  mi ventana, hay una pared reciente cubriendo un jardín. Recuerdo jugar a la guerra en él. Recuerdo el tamaño de los limones. Hay una escalera muy pequeña y graciosa, al lado crecía una planta de epazote; antes hubo una agujero en la tierra, en la ladera de la barranca.
Los gatos están corriendo por la azotea, pasan apurrados uno tras el otro corriendo, saltan a un tejado de lámina, caen al suelo y pasan junto a unos árboles frutales, dan vuelto junto a la habitación y cruzan el patio. Se detiene, a lo lejos se escuchan ladridos de los perros del pueblo, gruesos y breves, largos y agudos aullidos lejanos, hace frío. se escuchan maullidos.
***
Demasiado silencio, en el espejo mi sombra se extiende por todo alrededor, el resplandor de la pantalla ilumina mi rostro, un halo verdiazul rodea su sombra, luego la sombra le rodea.
Entiendo que un proyecto de ese tamaño implica una disciplina de trabajo, no se trata de elegir entre hacer o no las cosas. Defenderé con honestidad mis argumentos aunque estén basados en la intuición como siempre, es la única forma de quehacer que conocía, acabo de despertar, tengo los pies entumecidos, chuecos, rotos, robots.
Alguien decía que el tiempo se está yendo demasiado pronto. No se puede plantear la velocidad del tiempo como un problema basado en la percepción. La percepción obedece al tiempo desde el criterio científico, la mente tiene el entendimiento del tiempo desde su constitución y proceso evolutivo, espacio y tiempo son uno solo con la materia. Es un clasificador gaseoso. La observación a la luz de un proceso físico de uno social. Como es arriba es abajo, como es adentro es afuera.
***
Con-sis-ten-cia.

viernes, 18 de enero de 2013

viernes, 11 de enero de 2013

Parece una tradición emergente incribirse a cursos cuando comienza el año y de algún tiempo para acá he querido aprender lo básico para escribir páginas de internet de modo que hace un par de días busqué uno, consulté la descripción, el contenido y me inscribí. Ayer fue la primera sesión y puedo decir que ha sobrepasado las expectativas en todos lo sentidos excepto el pedagógico. Una de las razones principales para tomar una clase es recuperar la disciplina de las obligaciones escolares, contradicción circular que no termino de entender o asimilar pero que hizo bien su papel como motivación inicial. Luego fue aprendes algo y te relaciones con personas; tampoco sé bien a lo que refiera. Después se volvió una especie de escapatoria. Voy para despejar mi cabeza de todo lo que le atormenta en la rutina habitual, incluso romper la rutina, porqué no. Quién dice que una rutina no se puede romper intersectándola con otra distinta. Como siempre las cosa no salieron como esperaba. Y en eso viene el rush de sangre a la cabeza. Todo pasa justo como el deseo impronunciable dicta. La nauseabunda predisposición a la sorpresa, el remedo de exigencia de atención y obediencia, la experiencia de conocer lo necesario y estar seguro, a base de repetición, de que la verdad no se puede escapar de las líneas atrapadas entre sus palabras y los trazos en papel de la audiencia. No cabía de risa. Luego la sorpresa se volvió sombra de  alejamiento. Hasta dónde cabe la honestidad en una relación que no está hecha para presentarse cortésmente, en donde nadie dice lo que hace y todos son solo el fantasma que agacha la cabeza para escuchar. O sabe escribir, sabe invocar algunas palabras mágicas y solo vino a buscar lo que le hacia falta. Quién podrá resistir, quedarse, anularse, someterse. No hay aprendizaje posible que reprima en pos de la igualdad. No se es igual a los demás. El pasillo le escondía, le vi solo hasta evitar a un par de instructoras bloqueando el paso, al levantar los ojos hacia el letrero del salón 4, su luz me atravesó hasta desaparecerme en el silencio al que se aproximaban mis preguntas mientras mermerizado, suplicaba su perdón. Está allá afuera, gracias giro y respiración acelerada, una distracción, la imagen taladrando mi cabeza como ahora, luego una minipersecución, como jugueteo, bloqueándole el camino, buscando la prolongación del tiempo que no es el tiempo sino la oscuridad de la noche mientras le seguía sin saberlo hasta mirarla desviar el camino. Como querer beberse los rayos que filtra el tragaluz, arrojarse sobre ella para atraparla en el exterior, invitarla a la noche.

domingo, 6 de enero de 2013

The Soft Bulletin

sería como decir que anoche asistí a una lectura de Benoit Mandelbrot, que conocí a los héroes de las novelas de la infancia un domingo en el jardín del centro del pueblo, que tomé fotografías de las estrellas durante toda la noche, que llevo semanas seleccionando cuidadosamente las palabras que usaré cuando te vea, el orden de letras con que comienza cada oración y que acentuaré las sílabas en posiciones de la serie de Fibonacci.

miércoles, 2 de enero de 2013

001

el viaje anual no comienza el uno sino el dos de enero minutos después de medianoche, desperté, hacía frío y no llevaba suéter. me levanté del sillón en que estaba tumbado, busqué alrededor encendí la lámpara y contemple mi antigua habitación en la casa de mis padres. habitación de poca calidez en invierno pero gran protección en los calurosos veranos cuando el sol se mete frente a la ventana por estar rodeada de árboles, por el este estaba el viejo zapote plantado por los ancestros que dividía la propiedad de mi abuelo y su hermano el tío rafael; un zapote más joven en la dirección del noroeste que dividía la propiedad de mi padre y la tía ojilmia, un pino en la orilla de la propiedad de doña lourdes y el viejo sauce mutilado por el oeste.
saque una chamarra en el ropero y lo primero que vino a mi cabeza fue la idea de escribir una reseña sobre las ultimas infestaciones virales masivas y los mitos en torno a sus orígenes, cuando apareció la primera imagen como quien mira una película y esta es interrumpida y reemplazada por otra, la cena de la noche anterior, la discusión, un sonido de tacones que bajan por las escaleras de madera, la cortina del baño, luego el momento en que empieza la discusión, y luego una imagen de los volcanes en un día nublado, el frío de una mañana, posiblemente también un dos de enero pero de algunos años atrás, una sudadera gris con un gorro gris ajustado sobre mi cabeza, bajar la camioneta y contemplar entre los surcos y restos de cañas secas de maíz, verdes calabazas brillantes en el fondo de montones de cañas secas y tierra medio endurecida.
recién nos mudabamos a las nuevas habitaciones construidas por mi padre en el lugar que antes había ocupado un corral de vacas, luego jugando en el piso recién pulido con mi hermana, con mi hermano siento un niño pequeño que luego sería muchos centímetros más alto que yo, luego yo demoliendo unos bloques de adobe luego mi padre dándonos un lugar para vivir.
caminé a la cocina por un vaso con agua y respiré el aire frío de la noche, regresé, volví a tomar un libro que había estado leyendo y lo abrí en la página marcada, no entendí lo que leía, pensé libremente y me vino la idea de las máquinas, la misma imagen, la sensación de querer avanzar la página para descubrir que no hay tal posibilidad, agrupar patrones desconocidos es como pescar en un estanque peces de distintos colores y esperar que la secuencia de colores profetice un acontecimiento deseado, una variable aleatoria como el reel de una maquina tragamonedas, un tren de unos y ceros encerrados en paréntesis redondos, cuadrados y comillas francesas que supongo eran incluidas solo debido a mi preferencia por aquel símbolo.